Las fracturas pueden ser dolorosas, tanto física como emocionalmente. Cualquiera que haya sufrido una fractura comprende la importancia de un tratamiento eficaz y eficiente para recuperar la movilidad y la calidad de vida. En los últimos años se ha producido un gran avance en el tratamiento de las fracturas con la introducción de la terapia de ondas de choque. Este enfoque innovador está transformando la forma de curar las fracturas y ofrece resultados prometedores. En este blog abordaremos cuatro cuestiones clave sobre el tratamiento con ondas de choque y su papel en la revolución del tratamiento de las fracturas.
¿Qué puedo esperar de una sesión de terapia con ondas de choque?
Si está considerando la terapia con ondas de choque como parte del tratamiento de su fractura, quizá se pregunte qué puede esperar de una sesión. La terapia con ondas de choque, también conocida como terapia con ondas de choque extracorpóreas (ESWT), es un procedimiento no invasivo que administra ondas de choque de alta energía a la zona afectada. Estas ondas de choque estimulan los procesos naturales de curación del cuerpo, acelerando la reparación de los huesos fracturados.
Durante una sesión de terapia con ondas de choque, normalmente puede esperar lo siguiente:
- Evaluación: Su profesional sanitario evaluará primero su fractura y determinará si la terapia con ondas de choque es una opción adecuada para su caso concreto.
- Preparación: Antes de comenzar la terapia, se limpiará la zona de tratamiento y se aplicará un gel para mejorar la transmisión de las ondas de choque.
- Aplicación de ondas de choque: Un dispositivo especializado aplicará ondas de choque en la zona fracturada. Aunque puede sentir alguna molestia o dolor leve durante este proceso, suele ser llevadero.
- Duración: Una sesión típica de terapia con ondas de choque dura unos 15-20 minutos, dependiendo de la extensión y localización de la fractura.
- Frecuencia: El número de sesiones necesarias varía de un paciente a otro. Por lo general, se programa una serie de sesiones a lo largo de varias semanas para maximizar la eficacia de la terapia.
Después de cada sesión, es posible que experimente una ligera molestia o dolor en la zona tratada, pero suele ser temporal y puede tratarse con analgésicos de venta sin receta. Muchos pacientes consideran que los beneficios de la terapia con ondas de choque superan con creces cualquier molestia durante las sesiones.
¿Cómo funciona la terapia de ondas de choque?
Entender cómo funciona la terapia de ondas de choque es esencial para apreciar su papel en la transformación del tratamiento de las fracturas. Esta terapia utiliza ondas acústicas de alta energía generadas por un dispositivo especializado. Estas ondas de choque atraviesan la piel y los tejidos blandos hasta llegar al hueso fracturado.
He aquí cómo contribuye la terapia de ondas de choque a la curación de fracturas:
- Estimulación celular: Las ondas de choque estimulan las células óseas, aumentando el flujo sanguíneo y la liberación de factores de crecimiento. Esto pone en marcha la respuesta curativa natural del organismo.
- Microtraumatismos: Las ondas de choque crean microtraumatismos en la zona afectada, lo que desencadena la producción de nuevos vasos sanguíneos (angiogénesis) y la formación de nuevo tejido óseo (osteogénesis).
- Reducción del dolor: Además de favorecer la curación, la terapia con ondas de choque también tiene propiedades analgésicas. Ayuda a reducir el dolor al disminuir la inflamación alrededor del foco de la fractura.
La combinación de estos efectos acelera la curación de la fractura y mejora los resultados generales. La terapia de ondas de choque no sólo aborda la causa fundamental de la fractura, sino que también mejora la capacidad del organismo para repararse a sí mismo.
Es Terapia de ondas de choque ¿Doloroso?
Una de las preocupaciones más comunes entre las personas que se plantean la terapia con ondas de choque es si el tratamiento en sí es doloroso. Es importante diferenciar entre las molestias experimentadas durante la sesión de terapia y los beneficios que ofrece a largo plazo.
Durante una sesión de terapia con ondas de choque, es posible que experimente alguna molestia o dolor leve al aplicar las ondas de choque en la zona fracturada. Sin embargo, estas molestias suelen ser tolerables y de corta duración, ya que sólo duran lo que dura la sesión. Muchos pacientes describen la sensación como similar a un leve chasquido de una goma elástica contra la piel.
El dolor que se experimenta durante la sesión suele verse compensado por los beneficios potenciales de la curación acelerada de la fractura y la reducción del dolor a largo plazo. El objetivo principal de la terapia de ondas de choque es aliviar el dolor y favorecer la curación, lo que la convierte en una valiosa herramienta para el tratamiento de fracturas.
En conclusión, el tratamiento con ondas de choque está cambiando las reglas del juego en el tratamiento de fracturas. Ofrece un enfoque eficaz y no invasivo para acelerar la curación, reducir el dolor y mejorar los resultados generales. Aunque durante las sesiones terapéuticas pueden producirse algunas molestias, los beneficios potenciales compensan con creces los inconvenientes temporales. Si está considerando la terapia de ondas de choque como parte de su plan de tratamiento de fracturas, consulte a un profesional sanitario para determinar si es una opción adecuada para su caso concreto. Con sus prometedores resultados, la terapia con ondas de choque está transformando sin duda la forma en que abordamos la curación de las fracturas, proporcionando esperanza y alivio a quienes están en vías de recuperación.